Los “Dioses de Egipto”

Los “Dioses de Egipto”

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Una película titulada Dioses de Egipto va a ser lanzada hoy. Aquí está alguna información acerca de ella:

La supervivencia de la humanidad cuelga en la balanza cuando Set (Gerard Butler), el dios sin misericordia de la oscuridad, usurpa el trono de Egipto y sumerge al próspero imperio dentro del caos y el conflicto.

Aunque ello no parece ser una película bíblica, la expresión ‘dioses de Egipto’ se encuentra en la Biblia. Aquí está la primera vez donde Dios está hablando a Moisés acerca de la Pascua:

12 La misma noche yo pasaré por la tierra de Egipto y heriré de muerte a todo primogénito en la tierra de Egipto, tanto de los hombres como del ganado. Así ejecutaré actos justicieros contra todos los dioses de Egipto. Yo, Jehovah. 13 La sangre os servirá de señal en las casas donde estéis. Yo veré la sangre y en cuanto a vosotros pasaré de largo y cuando castigue la tierra de Egipto, no habrá en vosotros ninguna plaga para destruiros. (Éxodo 12: 12-13)

Así, nosotros vemos que Dios dice a Moisés que Él ejecutará juicio contra todos los ‘dioses de Egipto’.

Realmente, a través de todo el Éxodo, nosotros vemos que las diez plagas ayudaron a probar que el Dios de la Biblia era más poderoso que todo ‘dios’ de los egipcios.

Note algo que el Rey David afirmó centurias después del Éxodo:

23 “¿Y qué otra nación hay en la tierra como tu pueblo Israel, al cual Dios fue para rescatarlo como pueblo para sí, a fin de darse renombre y hacer a favor de él hechos grandes y temibles, al expulsar las naciones y sus dioses ante tu pueblo que rescataste para ti de Egipto? 24 Has establecido para ti a tu pueblo Israel como pueblo tuyo para siempre; y tú, oh Jehovah, has llegado a ser su Dios. (2 Samuel 7: 23-24)

¿Por qué mencionar esto?

Porque David se daba cuenta de que las ‘increíbles hazañas’ que ocurrieron en Egipto, incluyendo las diez plagas, fueron para mostrar que el Dios de la Biblia era real y que los dioses egipcios no lo eran.

Note los siguientes reportes acerca de los dioses de Egipto:

“Los egipcios consideraban sagrado al león, al buey, al carnero, al lobo, al perro, al gato, al ibis, al buitre, al halcón, al hipopótamo, al cocodrilo, a la cobra, al delfín, diferentes variedades de peces, árboles, y pequeños animales incluyendo a la rana, el escarabajo, la langosta y otros insectos. En adición a estos había dioses antropomorfos; esto es, hombres en la flor de la vida tales como Amún, Atum, u Osiris.” (John Davis, Moisés y los Dioses de Egipto, p. 95). (Como está citado por Padfield D. Contra todos los dioses de Egipto, #1. La Iglesia de Cristo en Sion. http://www.padfield.com/2002/egypt_1.html accedido 03/12/15)

Estos Ra (o, como él era llamado en el sur, Amón), Osiris, Isis y Horus eran los mayores dioses de Egipto. En días posteriores Ra, Amón y otro dios, Ptah, fueron combinados como tres encarnaciones o aspectos de una suprema y triuna deidad. Había incontables divinidades menores: Anubis el chacal, Shu, Tefnut, Ncphthys, Ket, Nut; …pero nosotros no podemos hacer de estas páginas un museo de dioses muertos. Incluso el Faraón era un dios, siembre el hijo de Amón-Ra, gobernando no meramente por derecho divino sino por nacimiento divino, como una deidad transientemente tolerando a la tierra como su hogar. Sobre su cabeza estaba el halcón, símbolo de Horus y totem de la tribu; de su frente se levantaba la uraeus o serpiente, símbolo de sabiduría y vida, y comunicando virtudes mágicas a la corona. El rey era el sacerdote jefe de la fe, y conducía las mayores procesiones y ceremonias que celebraban los festivales de los dioses. Era a través de esta asunción de divino linaje y poderes que él era capaz de gobernar tan largo con tan poca fuerza. (Durant W. El relato de la civilización, Parte uno: Nuestra herencia oriental. Great Neck, N.Y., marzo, 1935, p. 201; https://archive.org/stream//storyofcivilizat035369mbp/storyofcivilizat035369mbp_djvu.txt accedido 03/12/15)

Así, primero Dios desafía a Faraón a ser verdaderamente divino, luego Dios tornó el Nilo en sangre.

Esta plaga fue una afrenta para muchos de los mayores dioses de Egipto.

El gran dios Khnum era el guardián del río Nilo –él es usualmente representado como un ser humano con cabeza de carnero.

Hapi era el “espíritu del Nilo” y su “esencia dinámica”. Hapi era el dios de la inundación anual del Nilo. Los epítetos para Hapi lo describen a él como siendo el “señor de los peces y pájaros y pantanos”.

“La propia posición de Hapi hacía cierto que él se convertiría en una deidad exitosa. Todo el país miraba al Nilo como la fuente de toda riqueza y provisión, de manera que la deidad que presidiera sobre él rápidamente alcanzaría pública estimación. De esta manera Hapi rápidamente vino a ser identificado con las mayores y más estables figuras en la primera mitología egipcia. Él vino así a ser un socio con los grandes dioses originales que habían creado el mundo, y finalmente vino a ser mirado como el hacedor y modelador de todo dentro del universo. Nosotros lo encontramos a él acreditado con los atributos de Nu, la masa primaveral de agua, y esto en efecto lo hizo a él padre de Ra, quien había emergido de ese elemento. Hapi, ciertamente, permanecía en más inmediata relación para los egipcios que casi cualquier otro dios en su panteón. Sin el sol Egipto se habría sumergido en la oscuridad, pero sin el Nilo toda criatura viviente dentro de sus fronteras ciertamente habría perecido.” (Spence, Antiguos mitos y leyendas egipcios, p. 170).

Uno de los mayores dioses de Egipto era Osiris, el dios del inframundo; los egipcios creían que el Nilo era su corriente sanguínea.

Durante esta primera plaga, los egipcios habrían tenido que preguntarse en dónde estaba Tauret, la diosa hipopótamo del río. ¿Dónde estaba Nu, el dios de vida en el Nilo?

“Fue apropiado que las primeras de las plagas estuvieran dirigidas contra el propio río Nilo, la propia línea de vida de Egipto y el centro de muchas de sus ideas religiosas. Los egipcios consideraban al Nilo sagrado. Muchos de sus dioses estaban asociados sea directa o indirectamente con este río y su productividad. Por ejemplo, el gran Khnum era considerado el guardián de las fuentes del Nilo. Hapi se creía ser el ‘espíritu del Nilo’ y su ‘esencia dinámica’. Uno de los mayores dioses venerados en Egipto era el dios Osiris quien era el dios del inframundo. Los egipcios creían que el río Nilo era su corriente sanguínea. A la luz de esta última expresión, es apropiado ciertamente que el Señor tornara el Nilo en sangre! No solo se dijo que los peces en el río murieron sino que el ‘río apestaba’, y lo egipcios no pudieron usar el agua de ese río –imagine el horror y frustración de la gente de Egipto en cuanto ellos miraban a lo que era anteriormente bello sólo para encontrar peces muertos alineados junto a las playas y un desagradable color rojo caracterizando lo que había suministrado antes vida y atracción. Los cocodrilos fueron forzados a dejar el Nilo. Uno se pregunta lo que los adoradores habrían pensado de Hapi el dios del Nilo quien a veces se manifestaba en el cocodrilo.” (Davis, p. 102).(Padfiel D. Contra todos los dioses de Egipto, #1. La Iglesia de Cristo en Sion. http://www.padfield.com/2002/egypt_1.html accedido 03/12/15)

El Nilo y los dioses asociados con el Nilo, incluyendo algunos trinitarios como Osiris, fueron mostrados habiendo carecido de poder contra el verdadero Dios.

Aunque la actual civilización no está basada en el río Nilo, muchos actúan como si ella estuviera basada en el dólar de los EE.UU., que ha funcionado como la moneda de reserva del mundo por décadas. Y si bien Dios no ha tornado al dólar de los EE.UU. en sangre, Él tuvo advertencias relacionadas con la economía.

Se requiere entender que algunas de las advertencias en el “Antiguo Testamento” de la Biblia relacionadas con asuntos económicos van claramente a ocurrir en los últimos tiempos del fin:

42 La langosta tomará posesión de toda tu arboleda y del fruto de tu tierra. 43 El forastero que habite en medio de ti subirá cada vez más alto que tú, pero tú descenderás cada vez más bajo. 44 El podrá prestarte a ti, pero tú no podrás prestarle a él. El será la cabeza, y tú serás la cola. 45 Sobre ti vendrán todas estas maldiciones. Te perseguirán y te alcanzarán hasta que perezcas, porque no habrás escuchado la voz de Jehovah tu Dios, a fin de guardar los mandamientos y los estatutos que él te ha mandado. (Deuteronomio 28: 42-45).

29 Porque yo sé que después de mi muerte ciertamente os corromperéis y os apartaréis del camino que os he mandado. También en los días futuros os ha de sobrevenir el desastre, porque habréis hecho lo malo ante los ojos de Jehovah, enojándole con la obra de vuestras manos.” (Deuteronomio 31: 29).

3 Aunque por un tiempo la visión tarde en cumplirse, al fin ella hablará y no defraudará. Aunque tarde, espéralo; pues sin duda vendrá y no tardará. … 5 Y aunque el traidor se enriquezca, no prosperará el hombre arrogante. Ensanchará su garganta como el Seol; será como la muerte y no se saciará. Reúne hacia él todas las naciones; congrega hacia él todos los pueblos. 6 Pero, ¿no han de levantar todos éstos la voz contra él con refranes y sarcasmos? Le dirán: “¡Ay del que multiplica lo que no es suyo! ¿Hasta cuándo ha de amontonar sobre sí las prendas empeñadas?” 7 ¿No se habrán de levantar súbitamente tus acreedores, y se despertarán los que te opriman, y serás para ellos objeto de rapiña? 8 Porque has despojado a muchas naciones, todos los demás pueblos te despojarán a ti, a causa de la sangre humana y de la violencia hecha a la tierra, a las ciudades y a todos los que habitaban en ellas. (Habacuc 2: 3, 5, 6-8)

¿Por qué mencionar algo de esto en el contexto de la plaga contra el Nilo? Puesto que el gobierno de los EE.UU. continúa acumulando deuda con ‘muchos compromisos’ llamados notas del tesoro, la divisa se está quedando sin respaldo. El Nilo se tornó en sangre y causó estragos en Egipto. El dólar de los EE.UU. se está quedando sin respaldo a través de deudas de varias clases y la economía de los EE.UU. algún día será destruida.

El Nuevo Testamento advierte:

10 Porque el amor al dinero es raíz de todos los males; el cual codiciando algunos, fueron descarriados de la fe y se traspasaron a sí mismos con muchos dolores. (1 Timoteo 6: 10).

Los egipcios no creyeron que el Nilo podría ser devastado y la mayoría de los americanos no cree que el dólar vendrá a ser de no mayor valor que el escaso valor de los materiales de los que está hecho. Aunque nosotros necesitamos dinero para funcionar en sociedad, todos nosotros necesitamos asegurarnos de que él no esté demasiado en nuestro enfoque.

En el futuro, ¿Castigará Dios a NUESTRO mundo con alguna plaga similar de sangre como castigó Él alguna vez a los egipcios? Note:

8 El segundo ángel tocó la trompeta. Y algo como un gran monte ardiendo con fuego fue lanzado al mar. Y la tercera parte del mar se convirtió en sangre; (Apocalipsis 8: 8)

3 El segundo ángel derramó su copa sobre el mar. Y se convirtió en sangre como de muerto. Y murió todo ser viviente que estaba en el mar. 4 El tercer ángel derramó su copa sobre los ríos y sobre las fuentes de las aguas, y se convirtieron en sangre. 5 Oí al ángel de las aguas decir: “Justo eres tú que eres y que eras, el Santo, porque has juzgado estas cosas. 6 Porque ellos derramaron la sangre de los santos y de los profetas, tú también les has dado a beber sangre, pues se lo merecen.” (Apocalipsis 16: 3-6)

Así, nosotros veremos en una mayor escala lo que ocurrió en Egipto, las aguas tornadas en sangre.

No obstante, justo como el Faraón no creyó e hizo lo que él debería haber hecho, parcialmente porque él estaba engañado por los milagros de sus magos, después de las plagas de sangre en Apocalipsis, otros afectados no creerán y harán lo que ellos deberían hacer. En lugar de ello, “ellos blasfemaban el nombre de Dios que tiene poder sobre estas plagas; y ellos no se arrepintieron y le dieron a Él gloria” (Apocalipsis 16: 9).

¿Presta usted atención a estas pruebas y tests en su vida?

Ellas son por alguna razón.

Recuerde:

12 Amados, no os sorprendáis por el fuego que arde entre vosotros para poneros a prueba, como si os aconteciera cosa extraña. 13 Antes bien, gozaos a medida que participáis de las aflicciones de Cristo, para que también en la revelación de su gloria os gocéis con regocijo. 14 Cuando sois injuriados en el nombre de Cristo, sois bienaventurados; porque el glorioso Espíritu de Dios reposa sobre vosotros. 15 Así que, ninguno de vosotros padezca como homicida, o ladrón, o malhechor, o por entrometerse en asuntos ajenos. 16 Pero si alguno padece como cristiano, no se avergüence; más bien, glorifique a Dios en este nombre. 17 Porque es tiempo de que el juicio comience por la casa de Dios. Y si primero comienza por nosotros, ¿cómo será el fin de aquellos que no obedecen al evangelio de Dios? 18 Y si el justo con dificultad se salva, ¿en qué irá a parar el impío y pecador? 19 Por eso, los que sufren según la voluntad de Dios, que encomienden sus almas al fiel Creador, haciendo el bien. (1 Pedro 4: 12-19)

Así, aunque muchos apropiadamente pueden concluir que Faraón debería haber escuchado, nosotros necesitamos considerar si nosotros hemos escuchado lo suficiente nosotros mismos.

Para aprender más acerca de cómo Dios demostró Su poder sobre los otros ‘dioses de Egipto’, vea el artículo Pruebas, y Ramificaciones de las Diez Plagas del Éxodo.

Para aprender más de lo que sucederá a los altamente endeudados EE.UU. y sus aliados descendientes Anglo-Sajones, vea el artículo Anglo-América en Profecía & las Tribus Perdidas de Israel.

 

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